Los taxis amarillos

Quien me conoce, sabe que me peeeeta sobre manera montarme en un taxi. Eso de andar por la calle, querer ir a un sitio, levantar la mano y que te lleven... me encanta! Soy pija, en esto, mucho, lo reconozco.
Los taxis amarillos de NYC son muy chulos, grandes como barcos. Y a la pijeria de ir en taxi, se le une la sensación de ser una estrella de pelicula: entras así con las superprisas de la non-stop city y dices dónde vas mientras que cierras la puerta y el taxi sale pitando y ya en el semáforo le explicas ande vas otra vez. En el taxi ya te relajas (a menos que entre en atasco), y te pones a hablar por telefono con la gente que nunca te da tiempo a hablar... oooooooooo, lo mejor! le cuentas tu vida al taxista, que es la monda. Hay muchos taxistas que te preguntan y yo siempre les suelo contar mi vida... con mucha frecuencia me ha servido de terapia. No hay nada mejor que la opinión de los extraños simpáticos! empatizan, pero bien!
Eso ya lo hacía en Granada, ciertamente. Pero aquí, como siempre te encuentras a alguien de otro pais, fundamentalmente alguno de centro o sudamerica o Bangladesh (estos ultimos siempre te piden matrimonio al final si les dices que eres soltera, es la monda!), pues tienes opiniones más culturalmente diversas :) recuerdo uno superentrañable que me dijo al salir: "cuando vuelvas a tu pais, cásate, eh!" jajajajajajaja
Besos Bloguis

pd. Cubi la echivio. Algunas de estas fotos son de ud y Churre.
pd2. la foto 1 tiene meritaco, porque está hecha desde lo alto del Empire State Building.